Switch Language

INFOR 65: Carta de la Presidenta

Enviado por Wanda Gruenwald el Dom, 26/10/2014 - 11:28

Después de cuatro años de permanencia en el CA, en esta última carta quiero analizar y expresar mi opinión sobre algunas de las cuestiones que me han preocupado, especialmente los dos últimos años, en los que he sido la presidenta del CA de la FIMEM.

 

Empiezo por estimar el gran trabajo y entusiasmo de los movimientos organizadores de las últimas RIDEFs. En ellas se ha procurado mantener la coherencia con la pedagogía Freinet y con los temas propuestos. Temas que responden a los desafíos de la humanidad y a las cuestiones que nos planteamos como docentes de este tiempo que nos toca vivir. Docentes que no ignoramos la realidad de nuestro mundo, caracterizado por profundos desequilibrios, por injusticias, por un modelo neoliberal de desarrollo, basado en las leyes del mercado y en el que siguen sin respetarse los Derechos Humanos y las desigualdades están creciendo. Pero el trabajo hecho, las reflexiones, debates y conclusiones, no pueden quedase en el lugar del encuentro, han de ser el punto de partida del trabajo en los movimientos federados y en cada escuela donde se practica la pedagogía Freinet.

 

Si somos capaces de ir recogiendo los avances conceptuales y prácticos, los planteamientos teóricos y las prácticas educativas que se han ido generando en las últimas RIDEFs, nuestro paso por cada encuentro habrá sido fértil. Necesitamos preguntarnos cómo hemos cambiado nuestras escuelas para concienciar y promover acciones responsables sobre el entorno natural que nos rodea, cuáles han sido nuestras participaciones para favorecer la equidad y la justicia para las niñas y las mujeres en nuestra casa, en nuestra escuela, en nuestra comunidad, en nuestros movimientos regionales y nacionales, cómo vamos a promover la participación democrática de niñas y niños en las decisiones que les conciernen, en la escuela, en la ciudad y en la familia. Se requiere pues, hacer un ejercicio profundo de reflexión para descubrir la coherencia de nuestras acciones y la manera como asumimos los compromisos en la lucha por familias, escuelas, sociedades y movimientos más justos, libres, democráticos, inclusivos y equitativos.

 

En la  RIDEF 2012 se inició un reconocimiento a las mujeres de la FIMEM y al trabajo hecho por ellas, como se refleja en el dossier del encuentro entregado en Reggio Emilia. Si este reconocimiento también se lleva a cabo en cada movimiento, nos permitirá que en futuros encuentros seguiremos descubriendo la importante contribución a la Escuela Moderna de las mujeres de nuestro movimiento; sirva como ejemplo el trabajo bien hecho, el tesón y la lucha continua de nuestras compañeras africanas.

 

En Italia volvimos a plantear un debate sobre la laicidad. Algunas personas dicen que  es un debate antiguo, que resulta cansado y aburrido volver a hablar de laicidad, pero quizás debiéramos preguntarnos por qué se vuelve a plantear y si el verdadero debate no está por hacerse.

 En mi opinión, nuevamente hemos perdido la ocasión de debatir en profundidad sobre el concepto de laicidad, que  no es lo mismo que el uso de una prenda de vestir, las discusiones sobre el velo de algunos grupos no respondieron al debate planteado por el CA. Si queremos llegar a conclusiones y puntos de encuentro que nos sirvan para avanzar, tendremos que leer y reflexionar, individual y colectivamente, en cada uno de nuestros movimientos y llegar con los conceptos claros y las propuestas concretas.

Cuando hablamos de laicidad no hacemos más que recordar de dónde venimos. En 1927 se votaron los estatutos de la Cooperativa de la Enseñanza Laica (C.E.L) y nació el movimiento Freinet. La laicidad, siguiendo el significado que se le da en la Carta de Escuela Moderna, es trabajar por los valores de justicia social, por la libertad de expresión, la democracia, la dignidad humana, el respeto y el fomento de los derechos humanos. Y es contraria al fanatismo, al dogmatismo, a la superstición, al pensamiento único y a los valores absolutos.

Para avanzar en el desarrollo de la educación laica tendremos que preguntarnos qué hacemos en concreto para oponernos al pensamiento heterónomo, a las creencias de verdades absolutas, a la superstición, a los fanatismos, a los vasallajes y al dogmatismo mágico-religioso que coloca a las mujeres y a las niñas en una situación de inferioridad en relación a los hombres. Se quiera o no se quiera ver, tenemos un problema en la FIMEM, del  que sólo somos conscientes durante las RIDEFs; ese problema tiene que ver con una idea de religión como única filosofía de vida y con ciertas prácticas, promovidas por esas religiones, que ha calado en algunos participantes en los encuentros que no se dan cuenta que el espacio público, de todos y todas, no es para orar, ni hacer manifestaciones públicas de sus propias creencias, personales y por tanto privadas.

Si somos miembros de la FIMEM, tenemos un compromiso con la filosofía de la Escuela Moderna y por tanto colaboramos con las Instituciones del medio donde vivimos, con los representantes sociales, con el voluntariado social, con los representantes del mundo de la educación… para promover una enseñanza laica, pública y gratuita, que integre a todo el alumnado; niñas y niños con sus diferentes características, tengan o no deficiencias físicas o psíquicas.

 

Tengo que manifestar mi profunda decepción por el funcionamiento del CA. Su trabajo no respondió a lo que debe ser un consejo de una federación, cuya principal seña de identidad es la cooperación. Algunas personas debimos asumir una fuerte carga de trabajo y una preocupación constante para sacar adelante las tareas. Como causa principal apunto a la falta de permanencia en el cargo de las personas elegidas; el artículo 12 del reglamento dice que el CA se renueva por tercios cada dos años, y se da la circunstancia que del CA elegido en 2010 sólo quedaba una persona cuando acabó la RIDEF 2012. A ello hay que añadir que en la primera reunión del CA resultante de la elección de la Asamblea  General de León no estaban presentes dos de sus miembros y que uno de ellos dimitió seis meses después. En la reunión de 2013, en Mestre, hemos debido definir y planificar de nuevo nuestro trabajo y especificar las tareas de cada miembro del consejo hasta 2014. A pesar de haber acordado el modo de organizarnos y las tareas a realizar, como figuran en el Infor 63, el funcionamiento del CA no mejoró. Las próximas Asambleas tendrán que encontrar soluciones a estas situaciones.

 

No quiero finalizar sin hacer votos por el futuro de la FIMEM. Freinet murió en 1966 pero el movimiento internacional que inició, sigue vivo. Cada docente que investiga en el aula y lo comparte con su grupo cooperativo, está haciendo avanzar la pedagogía de la Escuela Moderna. El trabajo educativo hoy supone una profundización creativa de nuestra pedagogía, centrándose en la equidad, la participación creciente del alumnado, el respeto a la naturaleza, la historia cotidiana y la problemática social. La FIMEM nació hace más de cincuenta años, pero sus ideales, hoy como ayer, son escuela moderna, popular, laica, libertad y responsabilidad individual y colectiva.

 

En este sentido, muchos de nuestros movimientos están investigando y haciendo aportaciones relevantes en: coeducación, educación para la paz, el respeto a los Derechos Humanos, la ciudadanía, la inclusión de todas las diferencias y la participación en el desarrollo de la comunidad; como se ha venido poniendo de manifiesto en nuestros encuentros. A Reggio Emilia han venido un grupo de docentes jóvenes para participar en su primera RIDEF,  a quienes les damos la bienvenida y esperamos encontrarles en la próxima.

¡Larga vida a la FIMEM!

Agosto de 2014

Pilar Fontevedra Carreira

Código de idioma del comentario.

Texto sin formato

  • No se permiten etiquetas HTML.
  • Saltos automáticos de líneas y de párrafos.
  • Las direcciones de correos electrónicos y páginas web se convierten en enlaces automáticamente.