La FIMEM condena con la máxima fuerza el asesinato de doce personas en las oficinas de Charlie Hebdo.
Nada puede justificar una violencia así.
La FIMEM condena con la misma firmeza la voluntad de intimidar un órgano de prensa. Es la libertad de prensa en su conjunto la que ha sido atacada.
La FIMEM expresa su solidaridad con la redacción de Charlie Hebdo y con los heridos, y envía su pésame a las familias de las víctimas.
No es por casualidad que se ataca a la escuela, la cultura, la educación, la información: su proyecto es impedir a los seres humanos educarse como personas que piensan autónomamente, no encerradas en iglesias, o en madrazas… que se forman un juicio propio sobre los acontecimientos del mundo.